EL MUNICIPIO DE ALMIRANTE BROWN INSTALÓ DOS PUENTES PEATONALES PARA CRUZAR EL ARROYO SAN FRANCISCO EN CLAYPOLE

Martes 4 de junio de 2019. 
 EL MUNICIPIO DE ALMIRANTE BROWN INSTALÓ DOS PUENTES PEATONALES PARA CRUZAR EL ARROYO SAN FRANCISCO EN CLAYPOLE 
 Se trata de dos pasarelas de hierro con una longitud de 14 metros, que cubren por completo el largo del arroyo, que tiene 12. Los puentes tienen barandas de hierro y el piso está hecho de madera maciza. Beneficio para miles de vecinos que aguardaban por los puentes hace más de 30 años 

 El Municipio de Almirante Brown colocó dos puentes peatonales para que los vecinos del lugar puedan cruzar el arroyo San Francisco, en la localidad de Claypole, dando respuesta a un reclamo histórico en la zona y beneficiando a miles de frentistas. 

 Se trata de dos pasarelas de hierro con una longitud de 14 metros, las cuales cubren por completo el largo del arroyo, que tiene 12. Los puentes tienen barandas de hierro y el piso está hecho de madera maciza. El intendente Mariano Cascallares recorrió la zona y verificó la calidad de los trabajos realizados, al tiempo que dialogó con numerosos vecinos que se mostraron agradecidos porque el Municipio dio respuesta. 

 Una de las pasarelas fue ubicada en el cruce de la calle Italia con Cabral y el otro en Italia y Sarratea, de la citada localidad browniana. Se trata de un reclamo histórico por parte de los vecinos de la zona que, hasta este momento, cruzaban de un lado a otro a través de dos puentes precarios de cemento.
 “Es un avance muy importante porque los vecinos cruzaban de un lado a otro por un puente precario que no tiene baranda. Tenemos que recuperar el margen del arroyo como un lugar de encuentro comunitario y una de las formas es con estas pasarelas”, remarcó la subsecretaria de Infraestructura local, Gabriela Fernández.
 Por su parte, los vecinos también expresaron su alegría y aplaudieron con grandes sonrisas cuando los puentes fueron colocados. Es que, según contaron, es un reclamo histórico. Así lo destacó Aldo, quien vive desde hace 36 años en el barrio y asegura que “desde hace más de tres décadas que esperamos esto y la verdad es una mejora importantísima que nos va a cambiar la vida”.
 Mientras que Carolina, también vecina desde hace 17 años, explicó que los puentes viejos de cemento fueron hechos por los propios vecinos para poder cruzar. “Ahora vamos a poder trasladarnos de forma segura, sobre todo los chicos que van a la escuela y los abuelos”, subrayó.