Viernes 4 Sep 2015 | 09:32 am
Lomas de Zamora (Buenos Aires) (AICA): Los catequistas de la diócesis de Lomas de Zamora compartieron varios encuentros de reflexión y capacitación durante agosto. El obispo diocesano, monseñor Jorge Lugones SJ, los invitó a rezar por la prioridad diocesana de ser una “Iglesia en salida”.
Los catequistas de la diócesis de Lomas de Zamora compartieron varios encuentros de reflexión y capacitación durante agosto. Reunidos por vicarías, celebraron su tarea y renovaron su compromiso con la misión. Cercanos al Sínodo de la Familia, el lema que motivó sus encuentros fue “Familia educadora en el amor y la vida”.
Convocados por la Junta Diocesana de Catequesis, los catequistas de Lomas de Zamora y alrededores se reunieron el sábado 1º de agosto; el sábado 8 ocurrió lo mismo con los agentes de la vicaría que comprende los partidos de Almirante Brown, San Vicente y Presidente Perón; el 22 hicieron lo mismo los de Esteban Echeverría y Ezeiza, y el 29 de agosto fue el turno de los catequistas de la Vicaría de la Ribera.
El obispo diocesano, monseñor Jorge Lugones SJ, asistió a todos los encuentros, acompañado por sus obispos auxiliares, monseñor Jorge Vázquez y monseñor Jorge Torres Carbonell.
La pastoral familiar de la diócesis, con su delegado, el presbítero Armando Germán, brindó en los dos primeros encuentros un panorama de la realidad familiar y planteó la necesidad de repensar el vínculo de la catequesis con las familias. El presbítero Ricardo Montiel, sacerdote de Avellaneda-Lanús, hizo lo propio ante los catequistas de Ezeiza y de Echeverría.
Monseñor Lugones valoró la tarea los catequistas y el tiempo que dedican los catequistas semana a semana, y recalcó la intención de ser una “Iglesia en salida”.
“Es importante y la prioridad diocesana nos tiene que interesar. ¿Rezamos por ella? Gracias a Dios los jóvenes están saliendo con la imagen de la Virgen de Luján y la cruz de San Damián bendecidas por Francisco”, sostuvo el prelado.
Monseñor Lugones insistió en la necesidad que cada hombre tiene de Dios, y pidió ayudarlos para que se encuentren con Dios. “Francisco habla del encuentro, no con el catecismo debajo del brazo, sino del encuentro que se hace con aquellos que están en las periferias existenciales”, expresó el obispo.+
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