Un compromiso por la Paz
La Iglesia diocesana reunió hoy -en el marco del “Encuentro de un Pueblo que busca la Paz”- a los Intendentes de los seis partidos que conforman la diócesis, representantes de otras confesiones religiosas y referentes de distintos sectores sociales para suscribir el “Acta de compromiso por la Paz”.
El encuentro cívico-religioso, convocado por el obispo titular, monseñor Jorge Lugones sj, y los obispos auxiliares, monseñor Jorge Vázquez y monseñor Jorge Torres Carbonell, se desarrolló en la Plaza Grigera, frente a la catedral Nuestra Señora de la Paz.
Participaron de la firma del Acta los Intendentes Mauricio Gomez (San Vicente), Fernando Gray (Esteban Echeverría), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Alejandro Granados (Ezeiza), Guillermo Viñuales (Lomas de Zamora, en representación de Martín Insaurralde) y un religioso en representación del Municipio de Presidente Perón, más los representantes del ámbito político, judicial y gremial, de la Industria y las Cámaras de Comercio, del ámbito educativo e instituciones sociales.
La iniciativa de la diócesis se dio en el marco del Bicentenario de la Independencia Argentina, el “Año Jubilar de la Misericordia” que la Iglesia celebra en éste 2016 y el 150º aniversario del templo parroquial de la catedral Nuestra Señora de la Paz.
De acuerdo al Acta firmada, los protagonistas se comprometieron a “construir la paz”:
1. Cuidando, promoviendo y valorando la vida como derecho y valor primordial del ser humano, desde su concepción. Queremos una vida digna y plena para todos. Cuidar la vida es cuidar la familia como núcleo fundamental de la sociedad; es cuidar la calidad de vida con un trabajo digno, con el acceso a la tierra y a la vivienda propia, a la salud y al agua potable. La calidad de vida implica también la posibilidad de una buena educación para todos en vista al desarrollo integral de la persona.
2. Nos comprometemos a construir la paz en “el cuidado de la casa común”. El problema ecológico es un problema social ligado a la justicia donde resuena “tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres”. No hay paz social si se violenta y se abusa del ambiente degradándolo. Cuidar y proteger la casa común nos enfrenta con el desafío de un cambio de mentalidad, de una auténtica “conversión ecológica” que se traduce en conductas individuales y colectivas para la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral. Todos somos responsables de este gran desafío, tanto las autoridades civiles como la comunidad en su conjunto, así como también los empresarios y trabajadores y asociaciones barriales-vecinales y los diversos foros.
3. Nos comprometemos a construir la paz avanzando en la búsqueda de la justicia y la equidad social. Queremos desterrar de nuestros distritos todo tipo de exclusión: la pobreza extrema, el trabajo y abuso infantil, la trata de personas, y toda otra forma de esclavitud. Estas situaciones generan desigualdades irritantes, que atentan contra la dignidad de las personas y generan violencia.
4. Nos comprometemos a luchar seriamente contra el narcotráfico que flagela a las familias y a los jóvenes, y atenta contra el futuro de la sociedad. Buscaremos promover acciones de prevención contra las adicciones y hacernos cargo de los que las padecen.
5. Nos comprometemos a construir la paz trabajando por la cultura del encuentro que genera la amistad social y supera las enemistades estériles que destruyen el tejido social. Nos comprometemos a construir puentes y a derribar los muros que pudiesen separarnos.
6. Nos comprometemos a construir la paz enfrentando los conflictos con el diálogo, generando espacios para el mismo y para la búsqueda de consensos, convencidos de que “la unidad es superior al conflicto”.
7. Nos comprometemos a construir la paz luchando contra toda forma de corrupción, valorando la transparencia y la honestidad.
8. Nos comprometemos a construir la paz que supera la violencia y la inseguridad; la paz que es perdón y reconciliación; la paz social fruto del amor y la justicia.
La Iglesia diocesana reunió hoy -en el marco del “Encuentro de un Pueblo que busca la Paz”- a los Intendentes de los seis partidos que conforman la diócesis, representantes de otras confesiones religiosas y referentes de distintos sectores sociales para suscribir el “Acta de compromiso por la Paz”.
El encuentro cívico-religioso, convocado por el obispo titular, monseñor Jorge Lugones sj, y los obispos auxiliares, monseñor Jorge Vázquez y monseñor Jorge Torres Carbonell, se desarrolló en la Plaza Grigera, frente a la catedral Nuestra Señora de la Paz.
Participaron de la firma del Acta los Intendentes Mauricio Gomez (San Vicente), Fernando Gray (Esteban Echeverría), Mariano Cascallares (Almirante Brown), Alejandro Granados (Ezeiza), Guillermo Viñuales (Lomas de Zamora, en representación de Martín Insaurralde) y un religioso en representación del Municipio de Presidente Perón, más los representantes del ámbito político, judicial y gremial, de la Industria y las Cámaras de Comercio, del ámbito educativo e instituciones sociales.
La iniciativa de la diócesis se dio en el marco del Bicentenario de la Independencia Argentina, el “Año Jubilar de la Misericordia” que la Iglesia celebra en éste 2016 y el 150º aniversario del templo parroquial de la catedral Nuestra Señora de la Paz.
De acuerdo al Acta firmada, los protagonistas se comprometieron a “construir la paz”:
1. Cuidando, promoviendo y valorando la vida como derecho y valor primordial del ser humano, desde su concepción. Queremos una vida digna y plena para todos. Cuidar la vida es cuidar la familia como núcleo fundamental de la sociedad; es cuidar la calidad de vida con un trabajo digno, con el acceso a la tierra y a la vivienda propia, a la salud y al agua potable. La calidad de vida implica también la posibilidad de una buena educación para todos en vista al desarrollo integral de la persona.
2. Nos comprometemos a construir la paz en “el cuidado de la casa común”. El problema ecológico es un problema social ligado a la justicia donde resuena “tanto el clamor de la tierra como el clamor de los pobres”. No hay paz social si se violenta y se abusa del ambiente degradándolo. Cuidar y proteger la casa común nos enfrenta con el desafío de un cambio de mentalidad, de una auténtica “conversión ecológica” que se traduce en conductas individuales y colectivas para la búsqueda de un desarrollo sostenible e integral. Todos somos responsables de este gran desafío, tanto las autoridades civiles como la comunidad en su conjunto, así como también los empresarios y trabajadores y asociaciones barriales-vecinales y los diversos foros.
3. Nos comprometemos a construir la paz avanzando en la búsqueda de la justicia y la equidad social. Queremos desterrar de nuestros distritos todo tipo de exclusión: la pobreza extrema, el trabajo y abuso infantil, la trata de personas, y toda otra forma de esclavitud. Estas situaciones generan desigualdades irritantes, que atentan contra la dignidad de las personas y generan violencia.
4. Nos comprometemos a luchar seriamente contra el narcotráfico que flagela a las familias y a los jóvenes, y atenta contra el futuro de la sociedad. Buscaremos promover acciones de prevención contra las adicciones y hacernos cargo de los que las padecen.
5. Nos comprometemos a construir la paz trabajando por la cultura del encuentro que genera la amistad social y supera las enemistades estériles que destruyen el tejido social. Nos comprometemos a construir puentes y a derribar los muros que pudiesen separarnos.
6. Nos comprometemos a construir la paz enfrentando los conflictos con el diálogo, generando espacios para el mismo y para la búsqueda de consensos, convencidos de que “la unidad es superior al conflicto”.
7. Nos comprometemos a construir la paz luchando contra toda forma de corrupción, valorando la transparencia y la honestidad.
8. Nos comprometemos a construir la paz que supera la violencia y la inseguridad; la paz que es perdón y reconciliación; la paz social fruto del amor y la justicia.
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