Son solamente rostros de mujeres y niñas, que con su sangre inocente escriben la historia desgarradora de una violencia inaudita, que asola nuestra tierra.
Son las mártires de la modernidad, son las que la violencia machista, no le respeto edad o sexo; todas por igual cayeron bajo el designio asesino, que en forma cruel y artera, les arrebato la vida.
Marchamos una vez, y seguramente volveremos a marchar, para que las mujeres de nuestro país, tengan por fin el respeto, la seguridad y las leyes que sean necesarias para protegerse de aquél, que las hostiga, las amenaza y les falta el respeto.
Son nuestras madres, hermanas, esposas, e hijas a las que tenemos que proteger. Son las que nos dieron la vida.
No debemos cruzar los brazos, debemos actuar rápidamente en defensa de nuestras mujeres.
No podemos quedarnos sentados, sin hacer nada, mientras las mujeres son asesinadas.
Harto estoy de leer titulares escrito, con la sangre de las asesinadas. Me conmueve hasta las lagrimas, ver que se corta una vida por la violencia machista desenfrenada.
Compartamos nuestras ideas en pos de una prevención efectiva de estos desgraciados sucesos.
¡BASTA DE ASESINAR A NUESTRAS MUJERES!
MAURICIO SILVA
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